Amanece embajada de México rodeada de elementos armados en Bolivia
La Residencia Oficial de México en Bolivia amaneció con elementos armados vestidos de negro de institución de pertenencia desconocida, denunció el subsecretario para América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Maximiliano Reyes Zúñiga.
En redes sociales el funcionario de la cancillería publicó en redes sociales fotografías donde se aprecia dicho personal quienes, incluso, llevan la cabeza cubierta casi en su totalidad. Los individuos están colocados a lado de un vehículo negro con la leyenda “Policía”.
Reyes Zúñiga informó también de la llegada de 50 personas civiles, policiales y militares, en más de 10 vehículos.
Esta semana la oficina a cargo del Canciller Marcelo Ebrard ha denunciado hostigamiento y la intimidación de la que están siendo objeto la Embajada y Residencia Oficial de México en Bolivia, contra el personal acreditado y contra las personas que se encuentran bajo la protección del Estado mexicano en ese país.
La Paz, Bolivia. 25 de diciembre de 2019. El asedio por parte del gobierno de facto de Bolivia a la residencia oficial y a la embajada de México en dicho país, donde se ha brindado asilo a varios ex funcionarios del depuesto presidente Evo Morales Ayma, es incluso mayor al que se dio en el pasado, durante dictaduras militares en América Latina, señalaron funcionarios de la diplomacia mexicana. Los operativos policíacos en torno a las legaciones nacionales en Bolivia se mantienen este miércoles e incluso anoche llegaron muchos más elementos de las fuerzas de seguridad, indicaron.
Ebrard Casaubon presentará hoy ante la Corte Penal Internacional de Justicia un recurso jurídico por violación de operaciones diplomáticas por el asedio a las oficinas diplomáticas mexicanas en Bolivia.
Reyes Zúñiga advirtió que este comportamiento viola el artículo 22 de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, que a la letra dice:
“1.Los locales de la misión son inviolables. Los agentes del Estado receptor no podrán penetrar en ellos sin consentimiento del jefe de la misión.
“2. El Estado receptor tiene la obligación especial de adoptar todas las medidas adecuadas para proteger los locales de la misión contra toda intrusión o daño y evitar que se turbe la tranquilidad de la misión o se atente contra su dignidad.
“3. Los locales de la misión, su mobiliario y demás bienes situados”.