Duelo por la patente de la vacuna contra el COVID-19
Tres países son los que avanzan en el desarrollo de una vacuna eficaz que ponga fin a este desafío sanitario, aunque podría ser un proceso largo
China, Estados Unidos y la Unión Europea compiten por ver quién es el primero en desarrollar la vacuna contra el coronavirus (covid-19), el brote que hasta el momento ha causado la muerte de ocho mil 732 personas en todo el mundo.
El primer país en conseguir una vacuna eficaz que ponga fin a este desafío sanitario, social y económico, no solo logrará el reconocimiento mundial, sino también una patente que, en el corto plazo, podría dejar cuantiosas ganancias.
Sin embargo, para lograr dicho objetivo, las naciones deberán considerar que las patentes para los virus de la familia “corona” se han solicitado desde antes que se registraran casos relacionados al Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) y a la Influenza H1N1 (gripe porcina), está última que causó la muerte de miles de personas en 2009.
Aunque recientemente China anunció que ya cuenta con una vacuna para hacer frente al Covid-19, el reto será lograr que los principios activos reaccionen no solo en animales, sino en humanos.
La vacuna, en la cual mantiene sus esperanzas la nación asiática, fue desarrollada por la firma CanSino Biologics y la Academia de Ciencias Médicas Militares de China, que a través de un comunicado a la Bolsa de Hong Kong, anunciaron que realizan los primeros ensayos clínicos en Wuhan, la ciudad china en donde se originaron los primeros brotes de coronavirus.
Sergio de Alva, abogado de patentes, marcas y propiedad intelectual, comenta que la disputa por la patente del coronavirus es algo nunca antes visto, dado que en caso de que alguno de los países desarrolle una fórmula, no podrá seguir el mismo procedimiento de registro que una patente normal, debido a que la enfermedad ya está declarada como pandemia.
De Alva explica que en el sistema tradicional, el primer paso para registrar una patente consiste en presentar una solicitud ante las instituciones correspondientes de cada país. Posteriormente, el interesado deberá esperar 18 meses con base a las legislaciones internacionales en materia de patentes para que los activos sean revelados y cualquiera pueda solicitar su exclusividad.
“Si existiera una patente es muy probable que el gobierno ya hubiese retirado la exclusividad por causas de utilidad pública, sin embargo, todavía no se tiene una de manera oficial. Se debe tomar en cuenta que las patentes no se pueden soltar antes de los 18 meses, pues hay requisitos específicos que lo impiden, habrá que ver la reacción de estos países”, argumenta el abogado.
VACUNA PRESENTE PARA COMPARTIR
A pesar de que en la actualidad el covid-19 acapara los titulares, el virus de la gripe lleva siglos causando estragos.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año la epidemia de gripe deja entre tres y cinco millones de personas contagiadas de forma severa, y entre 290 mil y 650 mil muertes.
Desde los años 90 aumentó el interés por crear una vacuna universal que eliminará todos los virus que pertenecen a esta familia. De este periodo hasta la fecha, la Oficina Europea de Patentes (EPO, por sus siglas en inglés), ha recibido 390 solicitudes de patentes relacionadas a la gripe, pero solo 152 han logrado ser registradas, según datos de la misma institución.
Por su parte, Estados Unidos, al igual que China, aplica pruebas a un grupo de 45 voluntarios sanos en el centro de investigación que la organización Kaiser tiene en la ciudad de Seattle.
De Alva comenta que las tres naciones que hoy compiten para crear la vacuna, desarrollan diferentes principios activos para atacar la misma enfermedad, por lo que hay una gran posibilidad de que no exista una sola patente, sino, dos o tres.
“Con diferentes principios activos se podrían evitar conflictos. Ahora la pregunta es cómo van a capitalizar esa vacuna los gobiernos, porque eso ya no es un tema de farmacéuticas, es de competencia entre países”.