CIUDAD DE MÉXICO, mayo 16 (EL UNIVERSAL).- En pleno confinamiento causado por la pandemia del nuevo coronavirus, muchos se han dedicado a documentar el periodo de aislamiento y algunos proyectos culturales se han adaptado para seguir con sus propuestas pese a permanecer en casa. Este es el caso de Videotitlán, un festival de video fundado en México por Ildefonso Mercadillo, Miguel Ángel García — licenciados en cine y televisión por la universidad Centro — y Pamela Limón, licenciada en fotografía.
El proyecto surgió por la necesidad de tener un festival dedicado al cine independiente. Videotitlán, la tierra del video, recopila cortometrajes o películas de países latinoamericanos para darles difusión en espacios físicos.
Mercadillo, fundador del proyecto, explica que se eligió trabajar con las creaciones de artistas latinoamericanos porque «el año pasado estaban pasando muchas manifestaciones interesantes en Chile, Bolivia y otros países; nos enterábamos por videos en las redes sociales, pero nosotros no podíamos
ir a documentar lo que pasaba, así que lanzamos una convocatoria para que mandaran sus videos y así enterarnos de los sucesos».
Con esta recopilación, Videotitlán busca crear un retrato de América Latina. Miguel Ángel García explica que el festival es una alternativa a lo que ofrece la industria cinematográfica comercial: «casi nadie se acerca a estos realizadores y productores, nosotros ofrecemos estos proyectos personales al público», indicó.
«A partir de estos retratos individuales, al unirlos se hacía un gran retrato de Latinoamérica. Había similitudes en ciertos aspectos, cada país vivía su propia situación, pero al final parecía que era una situación en común», explicó Pamela Limón, sobre el resultado que obtuvieron al reunir en un solo video los cortometrajes seleccionados en la primera edición del festival que tuvo lugar el año pasado.
El resultado de la primera edición fue un largometraje formado por 16 videos de ocho países diferentes, de un total de 127 videos de 13 países que recibieron en un inicio, un resultado que sorprendió al equipo porque al lanzar la convocatoria solo la compartieron entre colegas y no realizaron publicidad.
Economía circular
Actualmente, el festival lanzó una segunda convocatoria, esta ocasión la temática es el video casero y tratan de replicar el mismo método: no pagar publicidad. «Las redes sociales tienen un algoritmo en el que si no le metes dinero, tu publicación se pierde, pero es algo que no queremos hacer por el momento, nos interesa más crear comunidad», explica García sobre anunciar la nueva convocatoria de voz en voz.
Aunque al equipo de Videotitlán sí les gustaría contar con el apoyo del gobierno o con patrocinios, pero explican que por el momento no consideran al proyecto como un negocio del cual les gustaría obtener ganancias, pero no lo descartan en un futuro:
«Sabemos que con la crisis del Covid-19 todo está muy difícil ahorita, pero tal vez una vez que se normalice todo podamos buscar estos apoyos y así contratar a gente para los talleres que impartimos, otorgar premios o financiar algunos proyectos», señala García.
Antes del Covid-19, Videotitlán realizaba sus dinámicas a partir del trueque, se ayudaba de las redes sociales para contactar a cineclubs y centros culturales independientes para ofrecer la cortometrajes proyección de cortometrajes a cambio de público, la impartición de talleres o colaboraciones.
«Estos cineclubs y centros culturales también trabajan sin recursos. En estos espacios independientes se arman proyecciones interesantes, siempre terminan en debate entre el público», destaca García sobre las proyecciones en espacios físicos, un elemento fundamental para el proyecto que es Videotitlán porque buscan trascender de la pantalla de los dispositivos y de plataformas como las redes sociales.
«No teníamos que seguir el mismo esquema que la industria. Ahorita no se trata del negocio, sino de inversión, cada uno le invierte en algo que a lo mejor no es monetario. Buscamos otro tipo de organización, de comunicación», señala Mercadillo. «No cobramos las entradas a las proyecciones ni los talleres, pero sí estaría padre tener el capital para que gente del medio imparta talleres y charlas», agrega Limón, quien destaca que no descartarían obtener una ganancia monetaria, sin embargo por el momento la prioridad es hacer crecer la comunidad de forma orgánica.
La nueva convocatoria
Hasta el 29 de mayo está abierta la convocatoria de la segunda edición de Videotitlán, titulada «Videos caseros». En esta, los participantes podrán abordar en sus videos cómo se vive el confinamiento y la pandemia, pero también se puede trabajar otros temas y no necesariamente debe ser documental, sino también ficción.
Lo que se busca es descubrir lo que pasa adentro del hogar desde diferentes visiones porque el equipo busca crear contenido que no caduque, que no sea noticioso, sino que el material cuente con opinión personal, detalla García sobre la convocatoria.
«(La pandemia) es un suceso que vino a cambiar la manera de vivir en el mundo. Convocar este proyecto es que la misma gente retrate su historia, lo que piensa y así lograr un amplio retrato de lo que está pasando», explican los organizadores.
Aunque apuestan por las proyecciones en espacios físicos, porque «lo presencial nunca le va a ganar a lo virtual», el festival se adapta a lo digital debido a la contingencia y pese a que buscan salir de la pantalla de dispositivos digitales, reconocen que es un medio útil para que la comunicación llegue lejos.
«El proyectar en videoclubs es una experiencia colectiva. Este material radical como lo es el video casero no es pensado que se proyecte en pantallas de cine, sino en redes, entonces al sacarlos de ese contexto, la gente reacciona en colectivo y así se crean mejores experiencias», concluyó Mercadillo.
Podrás encontrar más información para participar en la nueva convocatoria de Videotitlán encuentra más información en su sitio web.
