«Deuda pública en 2020 crecerá al doble que en el sexenio de EPN»
CUIDAD DE MÉXICO, junio 9 (EL UNIVERSAL).- Ante la crisis que atraviesa la economía por el coronavirus (Covid-19), la deuda pública este año puede crecer el doble que durante todo el sexenio de Enrique Peña Nieto y así establecer una nueva marca histórica, de acuerdo con previsiones de los analistas de BBVA y CitiBanamex.
Considerado la expresión más amplia de la deuda pública en México, el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) creció fuertemente durante la administración pasada.
La deuda pasó de 37.2% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2012, a 44.9% en 2018, un incremento de 7.7 puntos porcentuales durante los seis años que gobernó Peña Nieto, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Hacienda.
En sus conferencias mañaneras, el presidente López Obrador ha reiterado que, a diferencia de sus antecesores, su administración no va a incrementar la deuda con respecto al PIB durante este sexenio.
Sin embargo, en BBVA y CitiBanamex prevén que la deuda pública, tan sólo en 2020, va a crecer el doble que durante todo el sexenio pasado, debido al deterioro del marco macroeconómico.
En un escenario adverso en el que la economía mexicana se desplome 12% este año, la deuda se puede incrementar casi 15 puntos porcentuales del PIB durante el segundo año del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, al pasar de 44.7% en 2019, a 59.2% en 2020, de acuerdo con cálculos de BBVA.
Desde la perspectiva del banco privado más grande del país, el repunte de la deuda también estará relacionado con el menor PIB nominal, Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) adicionales por la pérdida en recaudación tributaria, y el efecto de la depreciación cambiaria en la revaluación de la deuda denominada en moneda extranjera.
«Anticipamos un panorama muy complicado para las finanzas públicas a partir de este año. El SHRFSP, el concepto más amplio de deuda pública, mostrará un incremento significativo como proporción del PIB en 2020», advierten analistas del banco español en un reporte publicado este martes.
«La prevista fuerte contracción anual en la actividad económica será un factor muy determinante en dicho incremento (de la deuda), tanto por su impacto directo como por sus efectos indirectos a través de la recaudación tributaria», estiman.
En caso de que la economía mexicana descienda 7% este año, la deuda se puede elevar 8.7 puntos porcentuales del PIB, al pasar de 44.7% a 53.4%, de acuerdo con BBVA.
Bajo este supuesto, la deuda subiría durante 2020 casi lo mismo que entre 2011 y 2018, cuando acumuló un incremento de 8.9 puntos durante los últimos dos años de Felipe Calderón y los seis de Peña Nieto, indican cifras de la Secretaría de Hacienda.
Por su parte, analistas de CitiBanamex prevén que la recesión de la economía mexicana, la menor producción de petróleo, la caída de los petroprecios y la depreciación cambiaria van a elevar significativamente la deuda pública amplia.
Estiman que el deterioro del marco macroeconómico llevará a la deuda a un nivel de 65.6% del PIB durante 2020, cuya expectativa es que la economía se reduzca 9% este año.
En el documento Pre-Criterios 2021 presentado el 1 de abril, la Secretaría de Hacienda estima que el SHRFSP va a representar 52.1% del PIB durante 2020 y 2021.
El gobierno va a recaudar menos de lo previsto este año y gastará más recursos para atender la emergencia en salud derivada del Covid-19, de modo que los niveles de deuda pública se van a presionar de manera significativa este año, reconoce el informe de la dependencia que encabeza Arturo Herrera.
En cualquiera de los escenarios, ya sea los presentados por la SHCP, BBVA o CitiBanamex, la deuda en 2020 va a alcanzar el mayor registro de los últimos 30 años, debido a que el SHRFSP no toca niveles tan altos desde que hay información comparable, a partir de 1990.
Durante la década de los 80, el gobierno reportaba una definición menos amplia de la deuda pública que el SHRFSP, la cual excluía obligaciones no presupuestarias.
Esta deuda pasó de 30.7% del PIB en 1980, a un máximo histórico de 104.1% en 1987, debido al desencadenamiento de la denominada «crisis de la deuda externa», la cual se venía gestando desde los gobiernos de Luis Echeverría y José López Portillo, pero terminó estallando con Miguel de la Madrid.
Los años posteriores a 1987 se caracterizaron por un proceso de renegociación que generó una disminución sistemática del saldo de la deuda en términos del PIB, de acuerdo con información de la Cuenta de la Hacienda Pública Federal.