CIUDAD DE MÉXICO, junio 19 (EL UNIVERSAL).- Mientras las fallidas negociaciones entre dueños y peloteros nublan la idea de tener Grandes Ligas este año, el virus del Covid-19 les ha enviado un recordatorio de que mantiene su estatus como principal antagonista del deporte actual.
Primero fueron los Phillies y ahora los Blue Jays, de acuerdo con Jeff Passan, de ESPN, quien reveló que un pitcher del equipo canadiense ha presentado síntomas de coronavirus.
Debido a esto, la organización decidió cerrar su complejo de entrenamiento de primavera, en Dunedin, Florida, en el que prepara un posible primer «Playball» en algún punto de 2020.
De inmediato, el lanzador anónimo se realizó una prueba, cuyos resultados no han sido entregados, pero la noticia tomó fuerza con un reporte que indica que ha pasado tiempo con varios elementos de los Phillies recientemente.
Dunedin colinda con la región de Clearwater, en la que ocho jugadores de Filadelfia arrojaron positivo esta tarde, obligando también a clausurar sus instalaciones.
Aunque el gerente general de Toronto, Ross Atkins, aseguró que están siendo muy cuidadosos con las pruebas, varios peloteros han declarado que no han sido sometidos a una, por lo que la preocupación por una posible ola de contagio crece cada minuto.
También en Florida, cinco empleados del Lightning de Tampa Bay, de la NHL, dieron positivo hoy. Ahora, el estado que se perfilaba para salvar un fragmento del deporte estadounidense ha comenzado a consolidarse como epicentro de la pandemia.