Dólar registra la mayor baja en 10 semanas y llega a 22.73 pesos
CIUDAD DE MÉXICO, agosto 5 (EL UNIVERSAL).- Este miércoles, el dólar reportó la mayor baja de las últimas 10 semanas y el precio del oro estableció un nuevo máximo histórico.
Tras venderse en más de 23 pesos durante la semana, la divisa se ofrece la tarde de este miércoles en 22.73 unidades en ventanillas de CitiBanamex, lo que equivale a una disminución de 39 centavos con relación al martes y significa la baja más pronunciada, en un día, desde el pasado 26 de mayo, cuando el dólar se abarató también 39 centavos.
En operaciones al mayoreo, el dólar se intercambia en 22.39 pesos, 28 centavos o 1.2% menos que el martes, de acuerdo con la agencia Bloomberg.
El dólar pierde terreno frente a la mayoría de monedas este miércoles, ante un mayor optimismo de que los congresistas en Estados Unidos logren aprobar un paquete de estímulos fiscales en los próximos días, expuso Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de banco Base.
En su opinión, la calma en los mercados también se debe a que Estados Unidos y China planean hacer una evaluación del acuerdo comercial firmado en enero, según personas cercanas a la administración de Trump, lo que puede moderar las crecientes tensiones políticas entre ambos países.
Para Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays México, si no fuera por los ingresos que recibe el país por concepto de remesas, el dólar podría estarse intercambiando en 24 pesos.
«De febrero al 24 de junio han salido del país 18 mil millones de dólares del mercado de deuda pública. Pero han entrado 19 mil millones en remesas. Si no es por las remesas, el tipo de cambio podría estar en 24 pesos», publicó Oviedo en su cuenta de Twitter este miércoles.
Por su parte, el oro estableció un nuevo máximo histórico de 2 mil 56 dólares por onza, lo que equivale a más de 46 mil pesos al tipo de cambio de hoy, de acuerdo con cifras de Bloomberg.
Esto se debe a la expectativa de políticas fiscales y monetarias expansivas por un periodo de tiempo prolongado, combinado con riesgos para el crecimiento económico global, lo que está elevando la demanda de oro como depósito de valor y activo de refugio, de acuerdo con Siller.
