¿Qué es el síndrome de Asperger?
CIUDAD DE MÉXICO, octubre 18 (EL UNIVERSAL).- El síndrome de Asperger forma parte de los trastornos del espectro autista (TEA), un grupo de afecciones caracterizadas por la alteración del comportamiento social, la comunicación, así como el lenguaje, su manifestación puede variar gradualmente, a través de comportamientos repetitivos, como la fijación por objetos específicos, el aislamiento y el retraimiento social, el cual padecen uno de cada de 160 niños a nivel mundial.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), los TEA aparecen en la infancia, durante los primeros cinco años de vida.
La complejidad de su diagnóstico, a edad temprana, radica en que no existen síntomas específicos, pues cada persona lo experimenta de manera distinta y empieza a visibilizarse cuando los niños dan inicio a la vida escolar. Sin embargo, en una publicación de “Ciencia UNAM”, se asegura que existe la posibilidad de detectar su presencia desde la vida intrauterina, ante las reacciones auditivas del feto.
Los TEA persistirán a lo largo de la vida de la persona que los padece, pues hasta la fecha no existe un tratamiento que cure el Asperger en su totalidad, sin embargo, varios especialistas refieren a una psicoterapia que beneficia el desarrollo de conductas sociales.
Los trastornos del espectro autista, como lo es el Asperger, se presenta en acompañamiento de comorbilidades, que es cuando la persona presenta uno o más dolencias además de la enfermedad primaria, como la epilepsia, depresión, ansiedad y el trastorno de déficit de atención e hiperactividad.
Jaqueline Cortés Morelos, especialista en psiquiatría y salud mental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) señaló, a través de la Dirección General de Divulgación en Ciencia de la institución, que «además de la psicoterapia se recurre a un tratamiento farmacológico para tratar otras enfermedades que acompañan al Asperger, para ayudar a controlar las alteraciones a nivel conductual».
Los TEA son generado por aspectos genéticos y neurológicos, que afectan el lóbulo parietal del cerebro, consecuencia de las alteraciones en las habilidades comunicativas y de interacción de quien lo padece. Sin embargo, esto no significa que la persona no pueda adaptarse a una vida común, ya que las personas con Asperger logran concluir sus estudios profesionales exitosamente y entablar relaciones afectivas.
Otra de las características del trastorno está relacionada con el nivel intelectual, el cual varía dependiendo de cada caso, pues puede presentarse un deterioro profundo hasta personas con aptitudes cognitivas altas, al mostrar niveles de inteligencia mayores al resto de la población. Sin embargo, las personas con TEA son objeto de estigmatización y discriminación, al ser privados de atención sanitaria, educación y la oportunidad de integrarse a la sociedad.