ANÁLISIS
Tomás Flores Rosales
• Delfina Gómez Álvarez, sometida a la prueba del “ácido”.
• Andrés López Beltrán, ronda el presupuesto mexiquense de más de 350 mil millones de pesos anuales.
• Paulina Moreno García, dispuesta a flexibilizar las políticas en materia de finanzas públicas .
• La posible doble incomodidad del aún senador Higinio Martínez Miranda .
La prueba del ácido a la que está sujeta Delfina Gómez Álvarez durante el primer trimestre de su sexenio estriba en saber pasar de lo político-doméstico a lo electoral y de aquí de nueva cuenta colocarse en lo político-gubernamental , lo que significa que en 90 días la maestra de Texcoco está obligada a situar su mandato en la normalidad plena a fin de resistir los sobresaltos que le implican el haber asumido al poder total mexiquense , cuyas aristas son tres :
PRIMERA ARISTA. – Ayer se analizó en este espacio lo que se intituló “Nueva Secretaria de Finanzas , pauta para una dimensión política mexiquense” , la que de inmediato se desgranó , pues resulta que ahora en la élite presidencial se difunde , tras bambalinas, la influencia que tendrá Andrés López Beltrán sobre el presupuesto del Estado de México a través de Paulina Moreno García, ungida antier por la nueva gobernadora como titular de las políticas en materia de finanzas públicas que aplicará la administración Delfinista, lo que ha generado cierta incomodidad incluso dentro de la estructura de poder de la recién instalada mandataria .
Y es que no hay mucha duda que así está sucediendo, pues como también ya se había analizado aquí , hablar de presupuesto mexiquense implica trasladarse a la realidad de los más de 356 mil millones de pesos que en promedio cada 12 meses aprueban los diputados locales , cifra que si bien se aplica bajo todas las normas legales , la discrecionalidad impera , sobre todo cuando la nueva “gurú” de los dinero públicos está plenamente identificada con la familia de alta alcurnia presidencial .
SEGUNDA ARISTA .- Hasta entrada la noche de ayer miércoles , el senador Higinio Martínez Miranda , fallido aspirante al lugar que hoy ocupa Delfina Gómez Álvarez, no anunció con oportunidad el haber concretado la solicitud de licencia a su escaño en la cámara alta del Congreso de la Unión como lo divulgó para quedar en libertad y sumarse al equipo formal Delfinista en el despacho de “jefe del gabinete” , puesto calificado por analistas políticos como de consolación .
Trascendió que de última hora el legislador es de los más incómodos por la incrustación de Paulina Moreno García al grupo que habrá de comandar el parlamentario a sabiendas de donde viene y por quien fue recomendada la que distribuirá para su uso los cerca de 356 mil millones de pesos , toda una fortuna que cualquiera reclamará para ser administrada , incluso aplastando a cualquiera que se ponga en el camino , como posiblemente lo pensó así Andrés López Beltrán .
Y es que Higinio Martínez Miranda lo intentó todo para no estar lejos de la Secretaría de Finanzas mexiquense, incluso junto con Maurilio Hernández, su incondicional compañero , líder de la bancada morenista en el congreso local , habrían filtrado que Higinio ocuparía la secretaría de Finanzas y el profesor de Cuautitlán Izcalli la de Educación , lo cual no lograron ni una ni otra .
TERCERA ARISTA .- Con esto se cumple la regla de tres en la política , planteada en el primer párrafo de este análisis:
a).- Delfina Gómez Álvarez está en plena prueba del ácido de tres meses consecutivos a partir del jueves pasado :
a.1.- pasó de lo político-doméstico a lo electoral .
a.2.- pasó de lo electoral a lo político-gubernamental .
Luego entonces tiene 90 días para normalizar su gobierno , empoderarse y resistir así a los embates alimentados desde las ambiciones económicas y políticas .
Solo así superaría la prueba del ácido.