Un iPhone cayó de 5000 metros de altura, iba en un avión, y lo sorprendente es que sobrevivió
Recientemente, un Boeing 737 de Alaska Arilines tuvo que aterrizar de emergencia después de que perdiera parte de su fuselaje a solo unos minutos de haber despegado. Para fortuna de todos los pasajeros, nadie resultó herido de gravedad y todos se encuentran con vida. Sin embargo, cuando se abrió parte del avión, se perdieron diversos objetos, uno de ellos fue un iPhone de nueva generación que cayó unos 4,878 metros sin presentar golpes ni fallas notorias en su sistema.
Aunque Apple apuesta por materiales de calidad para crear un producto resistente, es común que los iPhone, y otros modelos de smartphones, sufran daños tras una caída considerable. Razón por la cual soportar una caída de casi 5,000 metros es toda una hazaña para cualquier dispositivo electrónico.
El iPhone «irrompible»
Este iPhone fue descubierto por un usuario de Twitter, ahora 𝕏, registrado como SeanSafyre quien en un post compartió fotos del dispositivo y de la zona donde lo encontraron. En las imágenes podemos apreciar cómo lo único que parece roto es el cable de carga.
«Encontré un iPhone a un lado de la carretera… Todavía en modo avión con media batería y abierto a una reclamación de equipaje para #AlaskaAirlines ASA1282 ¡Sobrevivió a una caída de 16.000 pies perfectamente intacto! Cuando avisé, Zoe de NTSB dijo que era el SEGUNDO teléfono que se encontraba».
En el post de Sean se menciona que más de un celular fue encontrado cerca del área donde cayó el iPhone y en siguientes publicaciones habla acerca de otros items recuperados, aunque no especifica cuáles. En cuanto al fuselaje desprendido del avión, este cayó en el jardín de una persona en Portland, según lo compartido por Bloomberg.
Jennifer Homedy, directora de la National Transportation Safety Board, organismo estadounidense encargado de la seguridad dentro de los transportes, agradeció a Sean por su colaboración. Además, mencionó que se pondría en contacto con él para organizar la devolución del dispositivo. Por su lado, Alaska Airlines se pronunció en redes sociales lamentando lo sucedido:
«Queremos expresar nuestras más sinceras disculpas a todos los afectados por la inmovilización de nuestra flota 737-9 MAX. […]
Cuando podamos proceder con el proceso de inspección, todos los aviones serán inspeccionados a fondo de acuerdo con las instrucciones detalladas proporcionadas por la FAA en consulta con Boeing. […] La seguridad de estas aeronaves y de todos nuestros pasajeros es nuestra prioridad, por lo que nos tomaremos el tiempo y las medidas necesarias para garantizar la aeronavegabilidad, en estrecha colaboración con la FAA».
Un misterio sin resolver
Haciendo unos cálculos rápidos, suponiendo que el Boeing 737 iba a velocidad crucero de unos 236 metros por segundo, y asumiendo caída libre (el caso más ideal para este tipo de eventos) podemos hacer una burda estimación de la velocidad con la que impactó este iPhone, la cual debió ser de unos 390 metros por segundo.
Pese a todo, estas son sólo estimaciones, pero la idea es mostrar que aquel iPhone habría golpeado el suelo con muchísima velocidad. Solo podemos preguntarnos cuáles fueron las condiciones que hicieron posible que este teléfono resultara aparentemente ileso, pues una velocidad de impacto de 390 metros por segundo seguramente habría destruido el objeto.Este será uno de esos misterios que probablemente nunca podremos resolver.