Meta planea construir un descomunal cable submarino global, según TechCrunch. Tiene buenas razones para hacerlo
Cuando leemos artículos en la web, deslizamos vídeos en TikTok o redactamos correos electrónicos, raramente nos ponemos a pensar en el complejo funcionamiento de la red de redes. Tampoco necesitamos hacerlo. Sin embargo, puede resultar interesante recordar que uno de los pilares de Internet son los cables submarinos. TechCrunch señala que Meta quiere tener uno y está dispuesta a invertir una fortuna para conseguirlo.
El medio tecnológico explica que la compañía liderada por Mark Zuckerberg está trazando un plan que incluye construir un cable submarino de fibra óptica que se extienda por todo el mundo. La ruta planeada para esta ambiciosa infraestructura tecnológica, según fuentes cercanas al proyecto, busca conectar la costa este de Estados Unidos con Sudáfrica, la India, la costa norte de Australia y la costa oeste del país norteamericano.
Más de 40.000 kilómetros de fibra óptica
La firma estadounidense ha delineado cuidadosamente el trayecto de su multimillonaria infraestructura. Sunil Tagare, un experto en cables submarinos, explica que Meta ha querido evitar zonas conflictivas, como el Mar Rojo, el Mar de China Meridional, Egipto, Marsella, entre otras. Todo parece indicar que Meta busca reducir las posibilidades de cortes tanto accidentales como deliberados (los sabotajes son una realidad).
Hablar de esta iniciativa significa traer cifras descomunales. Se estima que la red de fibra óptica se extenderá a lo largo de más de 40.000 kilómetros. El presupuesto inicial se habría fijado en 2.000 millones de dólares, con un gasto total de 10.000 millones de dólares. Como se podría suponer, “la madre de todos los cables submarinos” necesitará años de trabajo. Según Tagare, el proyecto requería entre 5 y 10 años para completarse.
Un contratista repara un cable submarino en el océano
Cabe señalar que Meta no ha confirmado el proyecto, pero las fuentes dicen que la compañía planea hacer un anuncio a principios de 2025. También advierten que son pocos los contratistas capaces de realizar este trabajo, y que encontrar contratistas disponibles puede ser un desafío. Sin embargo, Meta podría haber establecido algún tipo de acuerdo secreto tiempo atrás, lo que le permitiría asegurar recursos para el proyecto.
Los cables submarinos son muy importantes para meta. Sin ir más lejos, sus servicios son los responsables del 10% del tráfico de Internet fijo del mundo y del 22% del tráfico móvil, según Sandrine. De hecho, en la actualidad es copropietaria de más de una docena de cables submarinos. Ahora bien, al tener su propio cable tendría un control absoluto sobre esta parte importante de la infraestructura tecnológica de red.
Sobre el papel, este enorme cable submarino ayudaría a Meta mejorar la calidad de acceso a sus servicios fuera de Estados Unidos (donde están gran parte de sus usuarios), aunque no llegaría directamente a ellos. Como ocurre habitualmente, la compañía debería acordar con proveedores de servicios de Internet y de telefonía móvil para esta parte del servicio. Toca esperar para saber qué sucederá finalmente con este interesante proyecto.
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