China pisa los talones a EEUU en ordenadores cuánticos: ya tiene uno superconductor con 504 cúbits
El desarrollo que han experimentado las tecnologías cuánticas durante los últimos cinco años es espectacular. EEUU y Europa tienen un rol muy importante en el avance de esta disciplina, pero algunas de las aportaciones más relevantes las está haciendo China. De hecho, en este ámbito mira de tú a tú a EEUU. Y es que estos dos países han alcanzado hitos notables durante los últimos años. La supremacía cuántica es uno de los que comparten, pero si nos ceñimos a las telecomunicaciones cuánticas China está intratable.
Además, el país liderado por Xi Jinping está a un paso de tener ordenadores cuánticos superconductores autóctonos. Durante los últimos años las empresas y los centros de investigación chinos que trabajan en el ámbito de los ordenadores cuánticos se han visto obligados a comprar los módulos de conectividad por microondas de alta densidad en el extranjero, principalmente en Japón. Estos componentes son fundamentales para transmitir datos entre los chips que conforman un ordenador cuántico, por lo que su presencia en estas máquinas es inexcusable.
Una de las peculiaridades más sorprendentes de estos módulos es que deben ser capaces de soportar unas condiciones de trabajo extremadamente rigurosas como consecuencia de los requisitos impuestos por los ordenadores cuánticos superconductores. Y es que habitualmente llevan a cabo su función a una temperatura muy cercana al cero absoluto (-273,15 ºC). Esta es una de las razones que explican por qué es tan difícil ponerlos a punto, pero, a pesar de ello, los ingenieros de la empresa china Origin Quantum Computing Technology han conseguido producir sus propios módulos de conectividad por microondas de alta densidad.
El primer ordenador cuántico chino con 504 cúbits superconductores ya está casi listo
El auténtico protagonista de este artículo no es un ingenio desarrollado por Origin Quantum Computing Technology; lo es el procesador cuántico Xiaohong de 504 cúbits superconductores. Este chip será el centro neurálgico del ordenador cuántico Tianyan-504, y ha sido desarrollado de forma conjunta por el Grupo Cuántico de China Telecom (CTQG), el Centro de Excelencia en Información Cuántica y Física Cuántica de la Academia China de Ciencias, y, por último, por QuantumCTek, una empresa especializada en tecnología cuántica con sede en la provincia de Anhui.
La plataforma de computación cuántica en la nube Tianyan ya ha sido utilizada por varias decenas de grupos de investigación internacionales
Wang Zhen, el gerente del Grupo Cuántico de China Telecom, ha anticipado que este ordenador cuántico estará disponible a través de la nube para que grupos de investigación procedentes de más de 50 países puedan utilizarlo en sus proyectos. De hecho, la plataforma de computación cuántica en la nube Tianyan está disponible desde noviembre de 2023 y ya ha sido utilizada por varias decenas de grupos de investigación internacionales.
No obstante, por el momento solo está disponible el procesador cuántico Xiaohong. De construir el ordenador cuántico e integrarlo en la plataforma Tianyan se encargarán QuantumCTek y el Grupo Cuántico de China Telecom, por lo que presumiblemente no estará a disposición de los científicos hasta dentro de varios meses.
La próxima llegada del ordenador cuántico Tianyan-504 nos invita a plantearnos si realmente China se ha colocado a la vanguardia en computación cuántica. Si nos ceñimos a la información pública, que es a la que tenemos acceso, la respuesta debe ser un sí contundente. Sin embargo, IBM, que, como todos sabemos, es una compañía estadounidense, continúa liderando esta industria con cierta claridad.
Esta empresa ya tiene lista la plataforma Heron (5K) dotada de mitigación de errores, así como el procesador cuántico superconductor Condor, de 1.121 cúbits. Y en 2029 planea tener listo Starling, su primer hardware cuántico dotado de la capacidad de corregir sus propios errores. No va a ser fácil que alguien arrebate a IBM el liderazgo que sostiene con tanta firmeza, pero no cabe duda de que merece mucho la pena seguir la pista muy de cerca a lo que hacen otras empresas, como Google o Honeywell. Y, por supuesto, a los avances que está alcanzando China.
Imagen | Google
Más información | Interesting Engineering