Nuevo Mazda 6e: sabor chino para el primer coche eléctrico de Mazda que quiere competir de tú a tú con los premium
El primer asalto al coche eléctrico no fue satisfactorio para Mazda. El Mazda MX-30, un coche al que posteriormente se le añadió una motorización de rango extendido, fracasó en ventas por su autonomía escueta. Ahora, la compañía nipona quiere cambiar la situación.
Lo hace con sus propias señas de identidad pero con mucho ADN externo. Estamos ante una berlina eléctrica (a contracorriente de lo que pide el mercado) pero desarrollada con una colaboración con la china Changan. Esto es lo que ofrece.
Ficha técnica del Mazda 6e
Mazda 6e |
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Tipo de carrocería |
Berlina de cinco plazas |
Medidas y peso |
4,921 metros de largo, 1,890 de ancho y 1,491 metros de alto. Distancia entre ejes de 2,895 metros. 2.027 kg de peso. |
Maletero |
330 litros. Maletero delantero de 70 litros. |
Potencia máxima |
190 kW (258 CV) y 320 Nm. |
Consumo WLTP |
16,6 kWh/100 km |
Distintivo ambiental DGT |
Cero emisiones. |
Ayudas a la conducción (ADAS) |
Obligatorias por la Unión Europea. |
Otros |
Pantalla de 10,2 pulgadas para el cuadro de instrumentos. Head-Up Display de 50 pulgadas. Pantalla central de 14,6 pulgadas. |
Híbrido eléctrico. |
No. |
Híbrido enchufable. |
No. |
Eléctrico |
Sí. Batería de 68,8 kWh (hasta 436 kilómetros) con motor de 190 kW (150 CV). Batería de 80 kWh (hasta 605 kilómetros) con motor de 180 kW (245 CV). |
Precio y lanzamiento |
Disponible en el verano de 2025. Precio por confirmar. |
ADN de Mazda con sabor chino
Si por algo se caracteriza Mazda es por hacer las cosas de una manera diferente. Aunque el mercado europeo aprieta por vender un mayor número de coches eléctricos a partir de este mismo año, la compañía nipona ha dicho y reiterado que no cree que éste sea el mejor camino.
Pese a ello, a los japoneses no les queda otra que aceptar la realidad que viven en el mercado europeo. Se aliarán con Tesla para rendir cuentas ante la Unión Europea pero saben que necesitan vender coches eléctricos para rebajar sus niveles de emisiones y tampoco dejar escapar un mercado que les puede ser interesante.
Lo hacen a su manera. En un mercado dominado por el SUV, Mazda apuesta por una berlina eléctrica que mantiene todas sus señas de identidad estética (lenguaje de diseño afilado, grupos ópticos característicos) pero que renuncia a la línea de diseño seguida hasta ahora en el interior. Esto último es una concesión obligatoria para poder poner el coche en el mercado con poco esfuerzo.
El coche que se venderá en Europa con el nombre de Mazda 6e ya se vende en China como Mazda EZ6. Esto ha obligado a Mazda a aquello de olvidarse de su posición respecto a las pantallas. En 2019 aseguraron que, por seguridad, eliminaban las pantallas táctiles de sus coches. En toda su gama, los coches cuentan con pantallas de dimensiones muy reducidas para lo que es habitual en estos momentos.
Pero el Mazda 6e llega con la misma pantalla que se ve en China. El cuadro de instrumentos es una pantalla de 10,2 pulgadas que se combina con un Head-Up Display con realidad aumentada de 50 pulgadas. Se complementa con una pantalla central de 14,6 pulgadas en un entorno que carece de controles físicos.
Mazda asegura que «la interacción con los sistemas de climatización, navegación y multimedia se ha simplificado mediante controles avanzados de voz y gestuales» pero, sin duda, tenemos que esperar a ver su comportamiento. Hasta ahora, la compañía nipona ha destacado por tener una ergonomía muy cuidada, con los botones físicos impresicindibles en el habitáculo, bien repartidos y de muy buen tacto. Dar todo el protagonismo a una pantalla central puede ser un paso atrás.
En su equipamiento de seguridad y ayuda a la conducción encontramos los ADAS ya obligados por la Unión Europea y, además, sistema de monitorización de ocupantes en las plazas traseras. La compañía no ha ofrecido muchos más detalles de lo que veremos en este apartado.
El sabor del desarrollo chino también se deja ver en sus proporciones. Estamos ante un coche de 4,921 metros de largo que con una batalla de 2,895 metros debería dar un enorme espacio a las plazas traseras pero que renuncia a un gran maletero. Éste se queda en 330 litros y mantiene un segundo maletero de 70 litros en la parte delantera.
En cuanto a sus capacidades técnicas, la berlina llega con dos baterías y dos motorizaciones. La versión menos costosa debería ser la que cuenta con una batería de 68,8 kWh y motor de 190 kW (258 CV). Asegura que con ella se pueden recorrer «hasta 479 km de autonomía». La gran ventaja es que se podrá cargar a 200 kW de potencia lo que le permite pasar del 10 al 80% de la capacidad de la batería en 22 minutos.
La versión pensada para realizar más kilómetros en la carretera llega con una batería de 80 kWh y un motor de 180 kW (245 CV) que ampliará las capacidades eléctricas del modelo. En este caso podrá recorrer «hasta 552 kilómetros» con una sola carga. En ambos casos son versiones de tracción trasera.
En cuanto a su disponibilidad, Mazda señala que el coche estará disponible en el verano de 2025 en los concesionarios españoles pero, de momento, no sabemos qué precio tendrá.
Fotos | Mazda
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