Al "chocoapocalipsis" sólo le faltaba un enemigo más para disparar el precio del cacao: la minería ilegal de oro

2025 está siendo un año nefasto para los amantes del café y, también, del chocolate. Los dos productos han vivido una escalada de precios casi sin precedentes estos últimos meses debido a problemas comunes como las dificultares en la cadena de suministro debido al transporte y las malas cosechas por la climatología. Pero si ponemos la lupa sobre el cacao, debemos hablar de otro problema que amenaza aún más la industria y que provocará enormes subidas en el precio del chocolate.
Y ese problema es la minería ilegal de oro, una nueva “fiebre del oro” que se está viviendo en los principales países productores de cacao.
Galamsey. Ghana es el segundo país que más cacao produce. El primero es Costa de Marfil, pero aunque el cacao sigue moviendo millones, hay algo que llama la atención: sólo el último año, Ghana perdió un 20% de su producción total de cacao. Como decimos, esto se sumó a malas cosechas por enfermedades en las plantas y al cambio climático, pero el resultado es el mismo: una crisis en el precio del chocolate.
La teoría nos dice que, si el cacao ahora vale más, los agricultores deberían estar beneficiándose (sobre todo con un cacao que superó los 10.000 dólares por tonelada en la bolsa de Nueva York), ¿verdad? Pues lo cierto es que no es tan sencillo y, además, esos agricultores han visto un negocio más rentable: minar oro. Tanto que hay muchos que se están pasando a esa práctica que ya tiene un nombre: galamsey.
Corrupción. Es así como los agricultores se están contagiando por una nueva fiebre del oro que resulta mucho más lucrativa que el consumo del cacao. La motivación es que el precio del oro está subiendo, pero el gran problema es que, como comentábamos, se trata de una minería ilegal, en la que se explota la tierra sin regulación y sin medida.
En Financial Times podemos ver cómo hay casos dramáticos de agricultores que, tras trabajar durante años en tierras ajenas, reunieron dinero suficiente como para alquilar un terreno propio y comenzar una plantación de cacao. Cuando llegó para empezar a trabajar el terreno, se dio cuenta de que había sido invadido por mineros ilegales, dejando las tierras totalmente inservibles.
Desde el gobierno se ha prometido endurecer la lucha contra este galamsey, pero existe un problema: un sistema en el que la corrupción institucional está profundamente enquistada y que hará complicado que se luche contra algo tan lucrativo.
Ecocidio. El problema va más allá de los cultivos, ya que profesionales de otros sectores están abandonando sus empleos en busca de oro. Kwabena Samuel era carpintero hasta que se convirtió en minero ilegal, afirmando que no fue fácil dejar su profesión por esto, pero que era “cuestión de supervivencia”.
Aparte de las consecuencias sociales, esta minería ilegal está dañando la tierra. Diferentes asociaciones y organizaciones han denunciado que los mineros arrasan extensas áreas de cultivo con maquinaria pesada y que, una vez llegan a una finca, tanto la tierra como las fuentes de agua quedan inutilizadas debido al intensivo uso de productos químicos. El año pasado, la empresa estatal de suministro de agua recortó hasta un 75% la distribución en ciertas zonas por los niveles insostenibles de contaminación.

La minería ilegal de oro no es exclusiva de África. Así están algunas zonas de Perú
De Ghana a la tableta de chocolate. Y la bajada de producción ya se está palpando. En Estados Unidos y durante el último año, el chocolate en minoristas aumentó un 10% su precio. Es algo que se está sintiendo en todo el mundo (el turrón navideño ya lo experimentó). Y fabricantes como Lindt (que ya había aumentado su precio más de un 6,3% a finales de 2024) o Nestlé ya han avisado de que el precio continuará subiendo durante 2025.
Costa de Marfil, calienta que sales. Algo que hace que este sea un problema aún más grave del que ya es (tanto económico como por la contaminación) es que no atañe exclusivamente a Ghana. Costa de Marfil también está amenazada por esta minería ilegal del oro y ya hay estimaciones que sugieren que, de cara al 2050, más del 50% de las tierras de cultivo de cacao podrían perderse en el país debido a esa minería, a enfermedades en las plantaciones y al cambio climático.
Crisistunidad. Y donde hay una crisis, también se abre una oportunidad. En este caso, quien puede sacar algo bueno del problema es Ecuador. Las estimaciones apuntan a que el país latinoamericano adelantaría por la derecha a Ghana como el segundo mayor productor de cacao. No sería algo a largo plazo, sino en un futuro tan inmediato como 2027, haciendo que Ecuador se convierta en un jugador aún más grande en el mundillo del cacao y uniendo fuerzas con su potente industria cafetera.
Sólo el tiempo dirá qué hacer, pero, si bien es cierto que luchar contra el cambio climático es difícil si no nos ponemos todos de acuerdo, luchar contra la minería ilegal de oro debería ser más sencillo. El problema es que es tremendamente lucrativo y que, como apuntan esos informes, en el momento que hay intereses políticos superiores, la tarea se complica.
Y todo eso se va a traducir en escasez, chocolate más caro y tierra contaminada por décadas.
Imágenes | Lady Castro, Das Morton, Planet Labs, Inc