Levantarse a las 3:52 AM, meter la cara en hielo, restregarse un plátano: la "morning routine" masculina llevada al extremo
Son casi las cuatro de la madrugada. Mientras la mayoría sigue dormida, hay quienes creen que ese es el momento perfecto para empezar a conquistar el éxito. No es solo despertarse temprano, es seguir una rutina milimétrica que mezcla disciplina extrema, autocuidado y deporte. Un hombre lo ha llevado al límite, y su vídeo se ha hecho viral.
La nueva sensación. En X/Twitter, la cuenta @tipsformenx ha difundido un reel que se ha convertido en toda una sensación viral. El vídeo original acumula en TikTok más de 8 millones de «me gusta» y se ha visualizado más de 99 millones de veces. En él podemos a Ashton Hall, un influencer de fitness, llevando a cabo una rutina matutina extrema donde se levanta a las 3:52 de la madrugada para empezar el día.
¿Comedia o realidad? Estamos en un punto donde la línea es delgada.
La rutina. El clip muestra a Hall quitándose el mouth taping, lavándose los dientes y aseándose antes de ejercitarse en el balcón. Luego decide leer (dos minutos, porque todo el vídeo está marcado por tiempos), escribir o manifestar (una práctica habitual en estas rutinas) y ver unos vídeos en el móvil. Después, llena un bol con agua con gas de la botella azul que siempre lleva consigo. Una vez listo, sumerge la cara en ese bol y, a continuación, se viste para ir a entrenar.
Para terminar, vuelve a su casa, donde se ducha y se come un plátano, el cual restriega la cáscara por la cara. Ya son las 9:00 de la mañana y, nuevamente, mete la cara en agua con hielo y, posteriormente, se le ve preparando lo que parece ser un podcast mientras le preparan el desayuno.
@ashtonhallofficial Day 191 of the morning routine that changed my life 3:50am to 9:30am Sin lives late at night.. if you’re dealing with a weak mind, bad decisions, or lack of productivity go to sleep early. 4:00am – 8:00am no one’s calling or distracting your productivity.. they are sleep. 8:00pm – 12:00am is the opposite. Just try 30 days.. send this to your partners. It’s time to do better.
«Morning skincare routine». Las rutinas matutinas de autocuidado empezaron a hacerse muy virales en TikTok, especialmente entre mujeres, quienes mostraban su mañana con un morning sheds seguido de un pequeño vlog con su rutina de ejercicio y cuidado personal. De hecho, estas prácticas, cuando no son llevadas al extremo, pueden resultar beneficiosas tanto para la salud física como mental, según ha explicado Andrew Huberman, neurocientífico de la Universidad de Stanford.
Sin embargo, este fenómeno ha ganado popularidad entre los hombres, que buscan proyectar una vida organizada, productiva y exitosa, alineada con la constante presión de optimizar cada minuto, como podemos ver en el vídeo de Ashton Hall. En otras palabras, el deseo de maximizar el rendimiento personal, pero también una presión sobre el físico y la imagen.
El culto al cuerpo. La presión estética masculina y la obsesión por la apariencia han sido impulsadas por el fenómeno del looksmaxxing, que implica el esfuerzo por alcanzar un «look perfecto» a través de rutinas rigurosas de entrenamiento físico, cirugía estética y cuidados personales. Como se explica aquí, este tipo de cultura refleja una obsesión por maximizar el atractivo personal, lo que lleva a muchos a invertir en su imagen como una forma de obtener validación social y económica.
Predecesores. En Xataka hemos analizado cómo este movimiento no solo está relacionado con el fitness, sino también con el autocuidado extremo, reflejando un deseo de cumplir con los ideales estéticos impuestos por las redes sociales para alcanzar el estatus del «Alfa». El autocuidado, acompañado de rutinas estrictas de ejercicio y hábitos como el cuidado de la piel o el uso de suplementos, se ha vuelto esencial en este enfoque del éxito. Influencers e inversores hacen de su imagen un reflejo de su éxito financiero, asociando la perfección estética con el logro personal y profesional, en un ciclo impulsado por las expectativas de productividad constante y la validación social.
La viralización. El video de Ashton Hall se ha hecho viral rápidamente, generando parodias e imitaciones. Sin embargo, lo que sí muestra es una tendencia entre influencers, emprendedores y criptoinversores promoviendo hábitos para «alcanzar el éxito». Lo que antes era propio de atletas de élite o fuerzas militares, ahora se ha transformado en un estándar aspiracional dentro de ciertos círculos masculinos.
Más allá de la exageración y la parodia, esta tendencia está calando entre muchos hombres, estableciendo un nuevo código de autocuidado. En este nuevo tipo de cuidado coexiste hidratarse la piel, meditar o hacer flexiones a las 4:00 de la madrugada en una misma rutina. En definitiva, aunque en muchos casos estas prácticas se adopten por presión social o por la obsesión con la productividad, están redefiniendo poco a poco el significado del autocuidado masculino, con implicaciones que merecen una reflexión profunda.
Imagen | Ashton Hall
