Todavía no sabemos qué causó el apagón en España, pero los expertos ya disputan una teoría: el rol de las renovables
Un apagón nunca antes visto afectó este lunes a toda España y Portugal, provocando una incertidumbre sobre la fiabilidad del sistema eléctrico. El incidente se produjo justo después de varios días históricos en los que la demanda de energía había sido cubierta en su totalidad por fuentes renovables. Esta situación ha abierto un debate sobre si la falta de sincronía eléctrica pudo ser una de las causantes.
Vamos por partes. Primero de todo, la sincronía en un sistema eléctrico significa que todos los generadores que producen electricidad (centrales hidroeléctricas, térmicas, nucleares…) giran a la misma frecuencia (50Hz), manteniendo estable el suministro. Estas tecnologías tradicionales ayudan a mantener la estabilidad de red gracias a sus grandes masas rotatorias, que actúan como “amortiguadores” ante cambios bruscos en la demanda o generación.
Por el contrario, las fuentes renovables como la solar o la eólica generan electricidad de otra forma: no giran a la frecuencia de la red mediante masas mecánicas. Se conectan al sistema a través de dispositivos electrónicos, lo que significa que no aportan inercia rotacional natural y, por tanto, no estabilizan la frecuencia de la misma manera.
Apertura del debate. El columnista de Bloomberg Javier Blas ha explicado que el apagón puede estar relacionado con una red dominada por generación renovable en ese momento. Sin embargo, su afirmación fue rápidamente matizada por otros especialistas, como el ingeniero Sergio Fernández Munguía, quien ha compartido una imagen de la estructura de la generación antes del apagón. En ella, los datos han mostrado que el 30% de la generación provenía de fuentes no renovables. Por su parte, el experto en renovables, Xavier Cugat, ha destacado que en ese momento había 6.604 MW de generación a gran escala activos, entre nuclear, termosolar y cogeneración, asegurando que el sistema todavía contaba con un respaldo importante de generación síncrona.
En cualquier caso, la hipótesis sobre la falta de sincronía sigue siendo solo eso: una hipótesis, como ha señalado el ingeniero Jorge Morales de Labra en RTVE Noticias: “Llevará meses determinar exactamente qué es lo que ha fallado”. Aunque en este último momento, la red eléctrica española ha comunicado en rueda de prensa que tras un análisis preliminar el apagón ha sido atribuido a una desconexión masiva de potencia al sistema eléctrico español en el suroeste del país, presumiblemente de energía renovable, y ha descartado el ciberataque como causa.
Tan importante la sincronía. Esto es un debate muy técnico, como ha explicado la profesora asociada a la Universidad Técnica de Dinamarca, Marta Victoria, cuando se rompe el equilibrio entre la generación y la demanda, la frecuencia de la red empieza a desviarse. Si los generadores no pueden reaccionar a tiempo —porque hay menos inercia mecánica—, el sistema no consigue estabilizarse, y se produce una desconexión en cascada. La experta utilizó una metáfora sencilla: «Es como un barco que se inclina hacia un lado y, en lugar de enderezarse, vuelca». Por último, Marta Victoria ha detallado que durante el apagón varios generadores, tanto solares como nucleares, se desconectaron automáticamente ante las oscilaciones de frecuencia. Esto agravó la inestabilidad y acabó provocando el apagón masivo.
Algo que falta. Por su parte, el profesor e investigador de la Universidad Rey Juan Carlos, Eloy Sanz ha recordado que la falta de masa rotacional en el sistema puede hacer más difícil corregir desequilibrios rápidos entre generación y demanda. En su análisis, ha subrayado que eventos de fallo en infraestructuras críticas o desconexiones súbitas pueden agravar la inestabilidad, especialmente cuando el sistema depende en gran parte de fuentes que no aportan sincronía.
En definitiva, ambos coinciden en que entender la falta de sincronía como un factor de vulnerabilidad es importante para entender la fragilidad que mostró el sistema, aunque todavía no se puede afirmar que haya sido la única causa.
Ahora mismo la red. A las 11:00 de la mañana del 29 de abril, a punto de cumplirse 24 horas desde el apagón, la red eléctrica española presenta una situación estable. La demanda se sitúa en torno a los 25.500 MW y está siendo cubierta mayoritariamente por energía solar fotovoltaica (32%), hidráulica (18,7%), eólica (17,7%) y ciclo combinado (22,2%). El sistema está operando con una combinación equilibrada de tecnologías síncronas y no síncronas, lo que indica una recuperación técnica completa tras el apagón del día anterior.
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