Israel-Palestina: La decisión de Israel de no autorizar más convoyes de UNRWA “es inaceptable”, asegura Guterres
El Secretario General ha asegurado que es «totalmente inaceptable» la decisión de Israel de no permitir más convoyes de ayuda humanitaria de la UNRWA al norte de Gaza, la principal agencia humanitaria en la Franja, donde ya hay personas muriendo de hambre.
António Guterres se encuentra de visita en la región y el sábado, desde el lado egipcio de Rafah, denunció los obstáculos a la ayuda.
«La decisión de no permitir los convoyes de UNRWA hacia el norte de Gaza donde tenemos una dramática situación de hambruna es totalmente inaceptable. Aquellos que han tomado la decisión deben asumir la responsabilidad frente a la historia de las consecuencias de esta decisión en relación con la dramática situación de la gente en el norte de Gaza, donde, como mencioné, ya tenemos a niños muriendo de hambre”, dijo este lunes en una rueda de prensa en Amán junto al ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi.
El Secretario General dijo que habló con heridos palestinos y con veteranos trabajadores humanitarios que han estado en las peores crisis de las últimas décadas: “Lo han visto todo y aun así, todos sin excepción dijeron que nunca habían visto algo tan horrible como lo que está ocurriendo en Gaza”.
Guterres insistió en que una invasión terrestre de Ráfah, donde Israel obligó a trasladarse a millones de gazatíes, sería “catastrófica”.
«La necesidad es urgente», dijo Guterres al tiempo que se comprometía a seguir presionando «para que se eliminen todos los obstáculos a la ayuda vital, para que haya más acceso y más puntos de entrada» al enclave.
El llamamiento del dirigente se produjo en un momento en el que la ONU y otros socios humanitarios informan de situaciones cada vez más desastrosas, especialmente en las provincias del norte, donde la OMS ha informado de que 27 niños han muerto por complicaciones relacionadas con la malnutrición grave.
«Debemos afrontar los hechos. No habrá una solución humanitaria sostenible con una guerra en curso tan sangrienta como ésta», subrayó el titular de la ONU, para luego añadir: «Permítanme repetirlo: nada justifica los aborrecibles ataques del 7 de octubre y la toma de rehenes por parte de Hamás y nada justifica el castigo colectivo del pueblo palestino».
El pedido del Secretario General de una paz duradera y un alto el fuego humanitario para permitir la entrega efectiva de alimentos, combustible y medicinas se produjo mientras la Agencia para los Refugiados Palestinos, UNRWA, confirmaba que las autoridades israelíes le habían prohibido transportar ayuda al norte del enclave.
Al mismo tiempo, la agencia de la ONU informó de que los productos básicos en las provincias del norte eran ahora «25 veces más caros de lo que eran antes de la guerra», con un saco de harina de 25 kg costando más de 400 dólares.
A pesar de las advertencias de que la hambruna es inminente en la franja, «no se ha producido ningún cambio significativo en el volumen de suministros que entran en Gaza ni en la mejora del acceso al norte», insistió la UNRWA. También declaro que durante los primeros 23 días de marzo, sólo 157 camiones de ayuda por día cruzaron a Gaza, en promedio. Esto está «muy por debajo de la capacidad operativa de ambos pasos fronterizos y del objetivo de 500 al día».
Siguen produciéndose retrasos en el cruce de Kerem Shalom desde Israel y en Rafah desde Egipto, señaló la agencia, que añadió que la muerte de varios policías palestinos en ataques aéreos israelíes cerca de los cruces a principios de febrero había «afectado gravemente» a la entrega de ayuda.
Anteriormente, el Secretario General destacó una vez más el impacto positivo de UNRWA en la vida de millones de personas, durante la última etapa de su visita solidaria anual con motivo del mes sagrado musulmán del Ramadán.
«Debemos esforzarnos para que los servicios únicos que proporciona UNRWA sigan fluyendo porque eso mantiene la esperanza», dijo tras reunirse con los residentes del campamento de refugiados de Palestina de Wihdat, donde viven algunos de los 2,4 millones de refugiados de Palestina de Jordania, el mayor número de la región. Insistiendo en que la agencia sigue siendo «un salvavidas de esperanza y dignidad» para muchos, Guterres subrayó la «diferencia real» que sus escuelas y centros de salud marcan en las vidas de los refugiados palestinos de todas las edades.
Además de proporcionar educación a más de 500.000 niñas y niños, unos dos millones de personas reciben atención sanitaria y oportunidades de trabajo, explicó Guterres, mientras que medio millón de los palestinos más pobres también se benefician de su ayuda. Todos estos factores contribuyen a que el UNWRA desempeñe un papel clave en «el avance de la cohesión social, la promoción de la estabilidad y la construcción de la paz», afirmó.
«Imaginemos que todo esto nos fuera arrebatado. Sería cruel e incomprensible, especialmente cuando honramos a las 171 mujeres y hombres de UNRWA que han sido asesinados enla Franja – el mayor número de muertes de personal de la ONU en nuestra historia.»
En Gaza, mientras tanto, el conflicto continuó sin tregua durante el fin de semana, con bombardeos y ataques aéreos israelíes en el sur de la Franja, incluyendo Rafah, donde la UNRWA estima que 1,2 millones de personas viven ahora, «la gran mayoría en refugios formales e informales».
Insistiendo en que hay «una creciente conciencia en todo el mundo de que todo esto debe terminar», el número uno de la ONU dijo que una solución de dos Estados es la única manera de garantizar un final duradero al conflicto palestino-israelí.
«Los israelíes deben ver materializadas sus legítimas necesidades de seguridad, y los palestinos deben ver realizadas sus legítimas aspiraciones a un Estado plenamente independiente, viable y soberano, en consonancia con las resoluciones de las Naciones Unidas, el derecho internacional y los acuerdos anteriores», afirmó Guterres.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, también expresó el lunes su profunda preocupación ante las noticias de que las fuerzas israelíes habían «asediado y atacado» el domingo el hospital Al-Amal de la ciudad meridional de Jan Yunis.
Tedros señaló que un trabajador palestino de la Media Luna Roja y otra persona refugiada en el hospital habían resultado muertos. «Se informa de otro ataque contra el Hospital Al-Amal en Gaza, otra situación en la que los pacientes y los trabajadores sanitarios corren un gran peligro«, dijo Tedros en una publicación en X, antes Twitter. «Pedimos su protección inmediata y reiteramos nuestro llamamiento al alto el fuego».
La agencia de salud dijo previamente que un equipo de la OMS «no recibió autorización» para llegar al hospital para evaluar las necesidades ni garantizar la derivación de pacientes, aunque pudo dar agua y primeros auxilios a nueve trabajadores sanitarios «que caminaron desde Al-Amal hasta el sur de Gaza».
Los medios de comunicación informaron el domingo de que vehículos militares israelíes habían llegado a los hospitales Al-Amal y Nasser de Jan Yunis. Las Fuerzas de Defensa de Israel han justificado anteriormente estas incursiones como necesarias para buscar a combatientes de Hamás.