Estado de México

Revisión de rastros mexiquenses que surten carne a la Ciudad de México

  • Las revisiones son para verificar que cumplan con la calidad sanitaria de los productos que ofrecen a la ciudadanía.

Alicia Rivera

La Coordinación de Regulación Sanitaria del Estado de México, informó que realiza la revisión de los rastros del Estado de México para verificar que cumplan con la calidad sanitaria para proteger la salud de la población.

En una reunión de trabajo con la Asociación de Empresarios y Ciudadanos del Estado de México (Asecem), Gerardo Valdés Martínez, coordinador de Regulación Sanitaria, explicó en la Ciudad de México prácticamente ya no hay rastros municipales, por lo que la carne que consumen los capitalinos proviene de los centros de matanza del Estado de México.

“En la Ciudad de México hay 9. 5 millones de habitantes y el Estado de México somos 17 millones, con lo que suman 26.5 millones de mexicanos que comen carne de los rastros de la entidad mexiquense, lo que es una situación muy delicada y tenemos que estar nosotros como Regulación Sanitaria al pendiente”.

El funcionario explicó que desde el 15 de octubre se lanzaron las Guías de Autoevaluación para todos aquellos establecimientos de bienes y servicios, insumos para la salud y salud ambiental y ocupacional, cuyas actividades redundan en la salud de la gente, como rastros, procesadoras de agua y hielo, productos de pesca, tatuajes, bebidas alcohólicas, hoteles, cosméticos, almacenamiento de medicamentos, establecimientos de aplicación de plaguicidas  y otros.

Exhortó al sector empresarial dedicado a estas actividades a realizar el ejercicio de autoevaluación que pueden encontrar en el micro sitio de la Coordinación de Riesgos Sanitarios en la página web de la Secretaria de Salud, para que sepan crear una cultura de prevención de riesgos sanitarios ante la población.

En el caso de los rastros municipales y TIF, el ejercicio de autoevaluación es necesario para detectar posibles deficiencias en las condiciones higiénico sanitarias del establecimiento, identificar factores de riesgo al personal y que el servicio de sacrificio y faenado sea óptimo en apego a las condiciones higiénico sanitarias.

PIE DE FOTO: Gerardo Valdés Martínez, coordinador de Regulación Sanitaria, explicó que en la Ciudad de México ya no hay rastros municipales, por lo que la carne que consumen los capitalinos proviene de los centros de matanza del Estado de México y hay que estar muy atentos de que cumplan con las medidas higiénicas y sanitarias.

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