ANÁLISIS
Tomás Flores Rosales
• Del mítico “Grupo Atlacomulco”, a la mítica “izquierda mexiquense”.
• Mismos tiempos , mismas prácticas que renuentes se niegan a desaparecer .
• Morenistas en excesos de poder , extravagancias y en camionetas de más de 2 millones de pesos que jamás el pueblo bueno mexiquense podrá disfrutar .
Es verdad que en 20 días no se puede calibrar a un nuevo gobierno u administración y menos , en medio de las peculiaridades que caracterizan al Estado de México, pero lo que sí se puede hacer es calcular a qué grado se podrá fincar un régimen de izquierda en las tierras del otrora poderoso, «Grupo Atlacomulco “.
Y claro, hasta el momento, en ese mismo rango de tiempo no se observan indicios que así sucederá, quizá en el mediano plazo aristas izquierdistas reales se asomen en la entidad donde se pretende construir una nueva nomenclatura desde el recién instalado poder mexiquense, siempre y cuando el partido MORENA en la sustancia sólida se incruste en el pensamiento ideológico de millones de mexiquenses.
Pues lo que ocurrió en los seis años próximos pasados no constituye haber tocado las fibras del pensamiento ciudadano y menos garantiza que una vena de izquierda esté en ciernes en las y los millones de jóvenes que el 4 de junio pasado habrían alimentado la demografía de los 12 años de edad a fin de que en ese mismo mes del año 2029 cumplan la mayoría de edad con credencial de elector en mano dando las gracias a Delfina Gómez Álvarez de haber gobernado tan disímbolo Estado de México .
Justo el año – el referido – en que un par de colaboradores cercanos en estos momentos a la nueva gobernadora desean dar continuidad a la actual administración estatal cuyo fin sexenal , de la maestra , se marca para septiembre del 2029 , cuando los postulados de izquierda no se antoja cuajen al cien por ciento en esa generación “doceañera” mencionada que sin credencial de elector aún no alcanzan a comprender todavía qué es la izquierda .
En razón de esa realidad actual las y los encargados de la nueva administración gubernamental mexiquense deberán acelerar el paso , incluso operar 16 horas diarias efectivas como se los ha presumido que lo hace el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a fin de que aflore la izquierda que a su decir muchos y muchas del círculo Delfinsta llevan dentro , hasta la médula quizá, sin demostrarlo.
Y no por estar 16 horas diarias continuas en la actividad gubernamental significa emular a López Obrador , lo que el tabasqueño intenta decir , como lo expresaría el clásico , es alimentar el verdadero cambio genético en la política y en la manera de gobernar, pues si en el círculo del poder reciente hay las y los que entienden que trabajar 16 horas diarias equivale a laborar horas extras , permea entonces un gran problema ideológico y de pensamiento progresista que nadie , absolutamente nadie podrá resolver para el bien de la instalación de un real régimen de izquierda que se ha prometido instaurar en territorio mexiquense.
Por eso habrá de iniciar con la labor pertinente en el sentido izquierdista el grupo gobernante morenista antes de que transcurra el tiempo que amenaza , en instancia primaria , encapsular a las nuevas y nuevos funcionarios públicos mexiquenses en el “gatopardismo” que millones de mexiquenses ya no desean , ni quieren .
O plantear, de una vez por todas , con honestidad valiente , el nuevo estilo de gobernar que dominará en territorio estatal durante los seis años próximos , sin viraje a la izquierda, pues ver o atestiguar conductas del pasado en protagonistas de MORENA confunde a la ciudadanía .
Quizá la inercia es la protagónica aún en este reducidícimo tiempo de haber arrancado la nueva administración pública y permite enseñar las extravagantes camionetas de más de dos millones de pesos cuyos y cuyas tripulantes con chofer exclusivo y sendas chámaras con insignias de MORENA usan para ir a comprar café en establecimientos que jamás el pueblo bueno ha imaginado .